miércoles, 20 de enero de 2010

Juanfran Aznar


Si, es miel. No os podéis imaginar cómo nos pusimos el amigo Juanfran y un servidor con el ungüento (él más que yo, claro está...) Menos mal que llené el suelo de tostadas con mantequilla para aprovecharla. Jeje.
Esta fue una de esas sesiones en que echas en falta tener a alguien para ayudarte. En una mano el bote de miel y con la otra la cámara, retocando un foco ahora, esquivando las gotas que caían... un gusto, para mi el resultado valió el pringue. Quizá haga otra versión de este retrato más adelante, no sé si me he pasado con el efecto espejo...

2 comentarios:

Jordi dijo...

Muy chula,pero yo sí miraría lo del efecto espejo.
Qué valiente JuanFran!!!!

picassia dijo...

a mí m parece delicioso el efecto espejo, dulce :p . d verdad, muy chulo!!